sábado, 5 de noviembre de 2011

Gutenberg: la primera revolución informática

En la ciudad alemana de Maguncia, en la ribera oeste del río Rin, fue encontrado muerto, en febrero de 1468, un personaje desconocido. Durante algunos años este anciano indigente y medio ciego recibió una asignación de ropas, granos y vino del gobernador local que tenía su sede justo al otro lado del Rin, en Wiesbaden. Muy pocas personas recordaban quén era o lo que había logrado. Se llamaba Johannes Gutenberg y era el padre de la imprenta moderna.

Johannes Gensfleisch zur Laden zum Gutenberg nació en el seno de una familia patricia de Maguncia, tranformándose en orfebre y trabajador del metal. Más tarde se hizo miembro del gremio de los orfebres de Estrasburgo, que era entonces una ciudad del Imperio Alemán. Allí fue donde comenzó a trabajar en un sueño extraño y muy costoso, que lo obsesionaba: encontrar un método para imprimir los manuscritos medievales que los monjes hacían cuidadosamente a mano, sin abandonar su sublime diseño ornamental.

Después de veinte años de intentos, Gutenberg había logrado diseñar varias innovaciones que le permitieron lograr su sueño de producción en masa: los tipos de impresión móviles, la prensa de impresión eficiente (supuestamente inspirada en la observación de cómo trabajaba una prensa para vinos), la tinta para impresión en base de aceite, y el uso del papel barato. Estas técnicas eran desconocidas en las imprentas existentes de Europa, y escasamente utilizadas en China, mientras que no fueron reemplazadas sino hasta el siglo XIX.


En 1455, Gutenberg produjo su primer libro impreso. Como no podía ser de otra manera, se trataba de una copia de la Biblia hermosamente ilustrada, y fue una edición de 200 ejemplares. Como puede verse en la imagen del Libro del Génesis perteneciente a la tirada de Gutenberg, la copia impresa a simple vista no presenta diferencia alguna con los manuscritos iluminados de la época.

Sin embargo, para esa época Gutenberg mantenía importantes deudas con su socio en la empresa, Johann Fust, quien había invertido en la aventura y estaba impaciente por obtener las ganancias. Fust llevó a Gutenberg a los tribunales y ganó su demanda, obteniendo el control de todo el equipo impresor de Gutenberg, incluyendo los tipos de la famosa Biblia de 42 líneas o Mazarinos.

Así Gutenberg enfrentó la ruina financiera. Sin embargo, para el año 1500, 250 ciudades europeas ya contaban con imprentas. La genialidad de Gutenberg logró alterar el curso de la historia y sentó las bases para la primera revolución a gran escala de la información.




Fuentes: historiasobrehistoria.com

■Egan, V.: Encyclopedia of t he World Geography, Rd Press, Australia, 1994

■The British Library: Gutenberg Bible